Gracias a programa de Fosis, apícola del valle del Tránsito recibe apoyo

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Por medio de un programa especial con fondos FNDR, Augusto Larraín ha podido emprender y avanzar en el negocio de la miel, ayudando a mantener este importante insecto.

En el sector de Junta Valeriano, en el valle del Tránsito, en la comuna de Alto del Carmen, vive Augusto Larraín junto a su familia. Llegaron hace nueve años. “Mi esposa es de Huasco, entonces una vez vinimos de visita y bueno, nos enamoramos del lugar”, cuenta.

En el lugar han montado, junto a su familia política, una pequeña comunidad eco sustentable que vive de la producción de super-alimentos y, ahora, se encuentran incursionando en el rubro de la apicultura.

Gracias a un proyecto Fosis, Larraín pudo comprar paneles solares, baterías y convertidores, para poder generar energía para las máquinas de producción, así como también adquirir dos refrigeradores, así como maquinaria industrial, para poder mantener sus productos y trabajar con nuevas recetas.

“De Fosis recibimos un fondo de $5.7 millones. Somos parte de la agrupación productiva Suplementos Alimenticios El Corral.  Empezamos vendiendo juntos con mi suegro y su familia, pero luego nos fuimos separando clientes y ahora trabajamos de forma complementaria”, explica.

“Desde que tengo 18 años, por hobby, comencé a tener abejas. Un día estaba haciendo dedo, en Pirque, y la persona llevaba abejas atrás. Ahí le compré las primeras y el amigo de una polola me enseñó durante un año”, cuenta sobre sus inicios.

Su fascinación con el mundo apícola continúo y fue creciendo. Cuando se instaló en el valle de Tránsito se dio cuenta de la falta que hacían las abejas en el valle, y conociendo el vital rol que juegan para el ecosistema, decidió emprender en el rubro. En un principio lo hizo ayudado de la Universidad de Atacama, pero gracias a un proyecto Fosis logró comprar cajones y nucleos propios, los cuales los tiene separados en distintas partes del valle.

Actualmente tiene 50 familias de abejas, que cada una consta de 50 mil integrantes, más o menos. “Las abejas pueden llegar a recorrer un radio de tres kms, pero es un caso extremo. El radio útil es un kilómetro” explica. Por eso su descición de mantenerlas esparcidas en distintas partes de El Corral.

“Los huertos son ideales para las abejas. Yo soy partidario del cultivo para el invierno, porque cuando hay floración la abeja va solo a ese árbol. Por eso yo tengo plantas que dan floración todo el año, que no dan tanto nectar, pero si ayudan a mantenerlas saludables en todas las estaciones”, explica.

“Las abejas siempre han ocupado un lugar muy importante en mi corazón, por eso durante mi gestión hicimos varios proyectos para apoyar a los apícolas de Atacama, porque no solo es una actividad importante, sino que juegan un rol vital en la agricultura y para todos los ecosistemas locales”, afirmó Teresa Cañas, directora regional de Fosis.

Con la llegada del nuevo año, Larraín podrá comenzar, con su nueva maquinaria, a producir miel de mayor calidad y cantidad, y trabajar con mayor cantidad de abejas. “Fui al sur y compré un montón de cajones de una empresa que estaba rematando. Ahora solo queda crecer e irlos llenando”, afima contento.

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