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El lunes pasado comenzó el IX Campeonato Nacional Juvenil Nogal de Oro 2022, que debido a los efectos de la pandemia, no se pudo llevar a cabo en el 2021.

El campeonato de cueca realizado en la región de Valparaíso reúne a 14 parejas de distintos lugares del país en cuatro días de actividades. En esta instancia, los encargados de competir por la región de Atacama son Valentina Olivares y Angelo Torres.

Al respecto, Olivares dice sentir “mucha emoción, porque al competir siento que dejo una parte de la región en distintos lugares de Chile. Estoy muy emocionada no solo por el hecho de competir y ver qué es lo que pasa el sábado, en la noche final, sino por el hecho de conocer personas nuevas y vivir experiencias nuevas”.

El 18 de diciembre la pareja fue ganadora del campeonato regional realizado en Vallenar. En esa instancia, se definió que serían los representantes de Atacama en el nacional de cueca en Nogales.

Sobre las actividades, Olivares explica que “normalmente tenemos actividades todo el día, ayer tuvimos cena de bienvenida y entrega de regalos a autoridades. Hoy tenemos un pasacalle por la municipalidad y en la noche tenemos la primera noche de competencias”.

“Mañana también tenemos actividades en la mañana y es la segunda noche de competencias. El último día tenemos un descanso y después viene la noche final con distintas actividades durante el día”, agrega la actual Campeona Juvenil Regional.

La competencia se mantiene latente durante la jornada completa. Olivares dice que “nos evalúan en todo momento, desde que estamos acá en el internado hasta que bailamos. Se evalúa desde nuestras vestimentas hasta cómo son nuestros zapatos”.

Dificultades

Valentina Olivares explica que el camino al Campeonato no ha sido fácil. “Con Angelo fue un recorrido súper difícil, porque él estuvo enfermo antes del regional y yo estuve colapsada de pruebas. Estoy pasando a tercero medio entonces mis notas son muy importantes. Fue un trabajo muy difícil el mezclar ensayos con nuestros horarios de estudio y de atención médica. Fue complicado”. Pese a esto, recuerda feliz la victoria en Vallenar: “Cuando nos nombraron campeones regionales todos esos momentos pasaron por nuestras mentes y lloramos mucho, era una emoción inexplicable”.

En cuanto al financiamiento de la competencia, corre principalmente por Olivares, quien sostiene que “lamentablemente el arte es poco valorado en algunas ocasiones. Yo soy de Tierra Amarilla, mi huaso es de Copiapó. Gracias a Dios el alcalde de Tierra Amarilla nos apoyó bastante, nos entregó un aporte monetario y nos entregó el bus para transportar a la barra. Además recibimos del Gobernador Miguel Vargas y Pucobre”.

“Lo demás, porque tenemos que diferentes vestimentas, yo tengo que traer siete vestidos, dos pares de zapatos, cosas así, lo financiamos nosotros. Hacemos pasacalles, colectas en la Copec, platos únicos para poder juntar dinero. Además de la ayuda que recibimos a veces de alguna autoridades”, finalizó Olivares.

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